– Úlcera intestinal aguda. – Perforación intestinal. – Cirugías abdominal reciente. – Diverticulitis en fase aguda. – Colitis ulcerosa en fase aguda. – Enfermedad de Chron en fase aguda. – Tumor canceroso del colon. – Hemorroides en fase aguda. – Fisuras y fístulas anales. – Hemorragias gastrointestinales. – Hipertensión sanguínea no controlada. – Enfermedades cardiacas severas. – Necrosis intestinal por radiación. – Aneurisma, embarazo.